viernes, 7 de agosto de 2009

Ni libre ni ocupado- dios y otras excusas

Una usuaria me dijo que todos necesitábamos creer en algo:

- Cuando mi marido enfermó no supe más que rezar por él. Le pedía a la Vírgen que no se lo llevara todavía.

- ¿Y mejoró?

- A los tres días murió, el pobre. Los médicos no pudieron hacer nada. Que Dios lo guarde en su Gloria.

Y ahí se acabó nuestra conversación. Varios silencios después, al llegar a su destino, la mujer me pagó la carrera religiosamente y se metió en un bar.

Entonces, con el taxi ya libre, ocupé mi cabeza en darle vueltas al asunto:

- Osea, que si tu marido cae enfermo, rezas y se salva: Dios hace milagros. Y si, por el contrario, rezas y muere: la culpa es de los médicos.

Me detuve en un semáforo.

- Y la tía va y dice que todos necesitamos creer en algo, ¡no te jode! ¿y por qué coño tememos que creer en Dios? ¿qué puto miedo nos han metido en el cuerpo para que tengamos que creer en Él? ¿miedo a la muerte? Será miedo a la vida, ¿no? Vamos, que me da más miedo el Vaticano que la propia muerte...

Otro semáforo.

- ¿Tradición, quizás? Y si tu padre es yonki, ¿tú también lo serías por tradición? No me convence, no me convence en absoluto.

Un Stop.

- Me encantaría que alguien me diera alguna razón coherente al respecto. Soy agnóstico, muy a mi pesar...

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